¿Qué es la autoestima en psicología? ¿Cómo subirla?

La industria de la autoestima ha hecho un gran trabajo a la hora de vendernos sus productos. 

Hasta hace relativamente poco tiempo de la autoestima solo hablaban los psicólogos.

Hoy en día la palabra autoestima está en boca de todos: coaches, terapeutas, gurúes, padres…

Todos te hablan de la importancia de la autoestima y cómo hacer para aumentarla.

Pero…

mi cabeza no para de pensar

¿Sabes realmente el significado de la autoestima? 

¿Es realmente necesaria la autoestima para conseguir tener una vida plena y significativa?

¿Es tan importante como todos dicen o solo otra estrategia de la industria para vender más?

¡Sigue leyendo!

Mi mente no para de pensar

Si buscas en internet “significado autoestima” te saldrán decenas de respuestas diferentes.

Sin embargo, la mayoría de ellas se reducen a la siguiente fórmula.

Autoestima= autoevaluación positiva

Es decir, cuando decimos que una persona tiene autoestima, lo que decimos es que esa persona hace valoraciones y juicios positivos de sí misma.

Por eso a veces encontrarás que se usan palabras como autovaloración, autoaprecio y autoaprobación como sinónimo de autoestima.

¿Qué significa la autoestima?

Para simplificar diremos que la autoestima es la opinión que uno tiene sobre el tipo de persona que es.

Si tienes una opinión positiva de ti mismo, tienes alta autoestima.

Si tienes una opinión baja diremos que tienes baja autoestima.

¿Cómo mejorar la autoestima?

Volvamos a la “fórmulas” para entender mejor a qué se reducen todos los ejercicios/formas/dinámicas… que pretenden mejorar la autoestima.

Mejorar Autoestima= construir una autoimagen positiva

La mayoría de programas de autoestima le dan mucha importancia a:

I

Evaluarse positivamente

I

Enfocarse en los puntos fuertes

I

Tratar de reducir o eliminar los juicios negativos

Este punto de vista tiene dos problemas principales:

1. No puedes hacer que tu cabeza pare de emitir juicios negativos sobre ti.

2. Puedes llegar a creerte (fusionarte) con tu autoimagen, ya sea positiva o negativa.

En este artículo aprendimos que tu cabeza nunca, nunca, nunca… va a dejar de avisarte de los “defectos” de tu personalidad, cuerpo, acciones, etc.

Si quieres saber por qué, te sugiero que leas: Mi cabeza no para de pensar.

También puedes apuntarte a la newsletter donde doy consejos diarios para aprender a llevarte mejor con tu mente.

Ejercicios de autoestima ¿Sirven?

En internet podrás encontrar miles de ejercicios de autoestima.

Si estás leyendo esto, seguramente hayas probado alguno.

¿Qué tal te fue?

No muy bien, ¿verdad?

Pueden que te hayan ayudado a aumentar de manera momentánea, pero tarde o temprano los juicios negativos sobre ti mismo vuelven a aparecer.

El caso.

Supongamos que los ejercicios para aumentar la autoestima funcionan.

Supongamos que te repites a ti misma…

 “ Soy una madre/trabajadora maravillosa. Hago un trabajo excelente”.

¿Qué hay de malo en creerse eso?

Dos cosas.

Bueno, no.

Tres.

1. Los opuestos se atraen

La primera es que los opuestos se atraen, como vimos en el post de las afirmaciones positivas.

Si tu le dices a tu mente que eres maravillosa seguramente te responderá diciendo cosas parecidas a estas:

“¡Venga ya”

“No te lo crees ni tú”

“¿A quién quieres engañar?”

¿No me crees? Pruébalo.

2. La alta autoestima puede meterte en problemas

Imagínate que llegas a tener un gran autoconcepto de ti.

Haces muchos ejercicios y logras tener una gran autoestima.

Piensas.

“Soy una madre maravillosa”

“Soy una trabajadora excelente”

“Soy una gran atleta y escaladora”

“Soy una persona de éxito”

¿Qué hay de malo en pensar así?

Verás, desde ACT (Terapia de Aceptación y Compromiso) no creemos entre la distinción de pensamientos malos o buenos.

Más bien preferimos ver si estos pensamientos son útiles o no.

Es decir, si nos sirven para llevar una vida plena y significativa, vivida a través de nuestros valores personales.

Entonces estos tipos de pensamientos pueden ser útiles o no.

Veámoslo.

Si piensas que eres una madre maravillosa , si te has enganchado a ese pensamiento por completo, no hay duda que tendrás una gran autoestima pero…

Pensarás que ya haces todo bien y no tendrás necesidad de mejorar

No te darías cuenta cuando haces mal las cosas

No tendrías autoconsciencia y te volverías insensible

No serias una mejor madre porque eso solo ocurre cuando eres capaz de ver tus errores

Pues lo mismo pasa con los otros ejemplos.

Si consideras que eres una trabajadora excelente puedes acomodarte y quedarte obsoleta. En un futuro no serás una buena trabajadora e incluso podrían llegar a despedirte.

Si tienes una gran autoestima en tus habilidades físicas puede que acabes lesionándote si cargas más peso del que puedes o que acabes metiéndote en problemas al enfrentar retos para los que no estas preparada.

Si piensas que eres una persona de éxito puedes llegar a desconectar con personas que no han tenido tanta suerte/oportunidades/habilidades e incluso puedes que acabes arruinándote confiando que todas tus decisiones son siempre acertadas.

3. La trampa de la autoestima

Por último, el día de tu funeral… ¿Cuál de las dos imágenes quisieras que apareciera?

Luchar contra nuestra mente, evitar que aparezcan juicios sobre nosotros mismos, tratar de creernos que somos “buenas personas” y por último mantener esa opinión positiva sobre nosotros a pesar de que los resultados no sean positivos… consumen mucho tiempo y esfuerzo.

Las personas que consideran la autoestima importante y quieren aumentarla, tienen que estar constantemente demostrando que eres una buena persona y justificando continuamente esta opinión.

Esto es agotador.

Y no solo eso.

Sino que no suele dejar espacio a otros aspectos de la vida.

Es como si estuvieras absorto en una partida de ajedrez que nunca termina mientras tu vida pasa de lado.

El mito de la autoestima

Te propongo un juego.

Si participas en él sabrás si la autoestima es importante o no.

Y evitarás caer en la trampa de la autoestima.

¿Lista?

¡Vamos al lío!

Lee estas tres afirmaciones detenidamente.

Reflexiona y piensa si son verdaderas o falsas.

Z

Aumentar tu autoestima va a mejorar tu rendimiento

Z

Las personas con alta autoestima son más agradables, tienen mejores relaciones sociales y causan mejor impresión a los demás

Z

Las personas con alta autoestima son mejores líderes

¿Ya lo tienes?

Perfecto.

Ahora, si quieres saber la solución, debes apuntarte a mi newsletter.

Recibirás un correo con las respuestas correctas a estas afirmaciones.

Así de sencillo.

Solo sabiendo si estas afirmaciones son ciertas o no, evitarás caer en la trampa de la autoestima.

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Yo no sé tú, pero no quisiera ver esto el día de mi funeral.

mi cabeza no para de pensar

Obviamente aparece mi nombre y sí, tengo pensado vivir 99 años.

¿Por qué no 100? Yo qué sé.

El caso.

Imagina que pone tu nombre.

¿Te gustaría?

Si quieres dejar de tener una información poco útil acerca de la autoestima y empezar a poner tu energía donde de verdad importa…

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Olvídate de la autoestima

Si has estado un tiempo haciendo ejercicios de autoestima para tratar aumentarla, seguro que te suena esta situación.

Normalmente, si te falta autoestima te sientes abatida. Pero, cuando consigues que tu autoestima esté alta, te esfuerzas constantemente para mantenerla.

No te relajas porque siempre existe dentro de ti una preocupación por volver a caer y volver a tener baja la autoestima.

Esto es agotador. 

Y los ejercicios para aumentar la autoestima solo hacen alimentar este ciclo.

Ya está.

Caíste en la trampa de la autoestima.

Y un día…

mi cabeza no para de pensar

¿Te has llegado a plantear cómo sería tu vida si te olvidaras completamente de la autoestima?

¿Si no te juzgarás de forma constante?

Obviamente, si has leído algún artículo de mi blog, sabrás que tu mente no va parar de formular juicios.

Sin embargo, estos no te impedirán llevar una vida rica y plena porque los verás cómo son: palabras e imágenes.

No lucharás con ellos. 

Simplemente dejarás esos juicios ir y venir, a su debido tiempo y tú podrías centrarte en las cosas que son importantes para ti.

 

En lo que tú defines como una buena vida.

Para eso viene muy bien tener claro los valores personales.

Cuando conectas con ellos te darás cuenta de que para llevar una vida rica y significativa no necesitas para nada la autoestima.

Lo que buscas no está aquí

Quizás algún día lo estuvo, quizás algún día lo estará.

De lo que puedes estar seguro es que ahora no está.

Puedes lamentarte. También puedes maldecirme por Twitter. O llamar a un colega y salir a celebrar la vida. 

O puedes apuntarte a mi newsletter.

De todas las opciones que te he dado, la más tentadora es la primera. La mejor, la última.

Pero la única que te dará un sistema para dejar de creer las excusas que te pone TU MENTE y pasar a la acción es apuntarte a la newsletter.

Cada día un consejo para lidiar con tu mente. Día que estás fuera, consejo que pierdes:

Si aumentar mi autoestima no es importante…

¿Entonces qué hago? ¿Qué es lo importante?

Todo esto te lo cuento aquí, en mi newsletter.

Si te interesa debes apuntarte.

 

Ahondaremos en el tema de la autoestima, con ejercicios y ejemplos muy claros para que aprendas a…

¿Mejorar tu autoestima? No.

A olvidarte completamente de ella. 

Para que puedas centrarte en lo que más te importa en esta vida.

Para escapar de la trampa de la autoestima y todos los gurús de desarrollo personal.

Sí te interesa, es aquí.

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Te aseguro que leyéndola muchos días te reirás, reflexionarás, algún día que otro te enfadarás pero…

Seguro que NO te aburres.

Si te interesa… Arriba.